Si debo confesar un pecado... es que te amo,
si debo cometer el crimen perfecto... es matar mis sentimientos,
si debo comprender el paso del tiempo... es esperando el olvido,
si debo sostener una promesa... es destruirte.
El dolor se apodera de mi corazón mientras la duda lo hace de mi mente... me sorprende como lograste crear esto en mi, como despertaste mis sentimientos y liberaste mis alas... el precio que pague fue muy grande, quizá por mi error o por el tuyo. Los recuerdos perturban el silencio y la paz interior, me quiebra por dentro el cariño, ¿Cómo olvido los momentos juntos?... ¿Cómo omito de mi vida tu juego?.
Principe?, ángel?... eres el demonio que encarno mis pecados, aquel íncubo que hizo pagar mis culpas... Maldito aquél momento en que nuestras vidas se cruzaron, me dejas en un infierno donde los tormentos creados por mi y desconocidos a la vez me consumen poco a poco.
Las lágrimas son de cristal y se congelan en el tiempo, mi corazón dolece y el alma se destruye.
Tanto es mi cariño y el odio que te puedo ofrecer. Mi culpa, tu error.
Descansa en la mentira
